En este artículo me voy a centrar en la segunda parte del inconsciente, es decir, aquella parte donde se almacenan aquellos pensamientos negativos que no hemos asimilado correctamente, los deseos incumplidos -los que no se han hecho realidad y no hemos entendido la causa del porqué han fallado y los pensamientos ha hechos que nos han impactado en nuestra infancia.
El maestro tiene razón, cada persona, animal, y planta de este mundo viene con un solo propósito. El de aprender, aprender a vivir, a salir de situaciones, a manejar su propia vida.
En teoría se dice que debemos aprender aquellas cosas o situaciones que en nuestra vida anterior no pudimos aprender o bien no fuimos capaces.En cierto sentido todo esto, aunque sea una teoría, tiene algo de realidad.
Es curioso que aquellos baches que pasamos en nuestra infancia y de los cuales no llegamos a entender, se nos repita de nuevo años más tarde.
Un ejemplo :
Cuando Raúl tenía 9 años, iba al colegio y aprendía como todos sus compañeros, sin embargo a la hora del recreo dos niños le esperaban cada día para pegarle y quitarle el bocadillo del desayuno.
Cuando los profesores estaban cerca de Raúl, aunque no decía nada, se sentía protegido, aprendió que si él se hallaba cerca de un adulto, los niños maltratadores no se le acercaban y por tanto ese día no recibía la paliza.
Raúl durante toda su estancia en el colegio aprendió a protegerse del adulto en el momento que hay problemas, en vez de resolver su propia situación.
A los 13 dejó de tener interés por los estudios, ya que estaba cansado de tener miedo y que lo esperaran a la hora del recreo.
Como no tenía la edad para trabajar, empezó a hacer pellas - no asistir a clase-.
Probó una vez con miedo, pero como vio que no pasaba nada, siguió faltando a clase cada vez más y más hasta que dejó de ir.
Raúl volvió a aprender de nuevo - la no asistencia a clase significaba no recibir el maltrato diario-.
Su padre lo descubrió y le buscó un sitio donde se realizaban cursos para aprender un oficio.
Antes de empezar el curso - de carpintero de 6 meses de duración -, Raúl tenía miedo de los niños que podía encontrarse allí, y tenía pánico de tener que volver a revivir sus años de la infancia.
Efectivamente ocurrió todo lo que temía. Los primeros días se sentía bien, todos eran nuevos, y la mayoría callados a excepción del típico niño que se cree el mejor de todos y a la vez muestra claramente desinterés por las clases y por el profesor.
No llegó a la semana cuando este niño ya se metía con Raúl, y antes de dos semanas ya había formado un pequeño grupito que se metía constantemente con nuestro protagonista.
Raúl aplicó lo que había aprendido - la mejor forma de huir de los problemas es protegiéndose ante los adultos -.
Sin embargo aquí aprenderá una nueva lección: Esta nueva lección es que con el tiempo él se está haciendo mayor, y llegará un momento en que no podrá protegerse de un adulto, pues ya no será un niño, sino un hombre.
Si analizamos a Raúl, es muy probable que aún no haya entendido el porqué todo el mundo quiere pegarle o quiere meterse con él.
Raúl desde pequeño no se ha enfrentado a su problema, al revés, a aprendido a huir del mismo, sabe que si se aleja, el problema desaparece por unos instantes.
Lógicamente es el método fácil, y el que utilizamos muchas veces consciente o inconscientemente los adultos cuando tenemos que enfrentarnos a una situación. Este problema de Raúl - el maltrato psicológico y físico -, ha quedado grabado en el inconsciente, dentro de la segunda sección del mismo, donde se almacenan todos aquellos pensamientos que no han sido analizados y quieren ser desechados y olvidados cuanto antes.
Estos mismos pensamientos se han convertido en miedos, en una alerta para el organismo, por tanto, cada vez que haya una pequeña señal - gesto o palabra por parte de otras personas que en ese instante estén a su lado - que pueda asociarse a un indicio de maltrato psicológico, saltará la alarma en el inconsciente - tendrá sensación de miedo y ansiedad -, activando al mismo tiempo un plan de emergencia - huir del problema, antes de que éste se origine, emitiendo un gesto, una palabra o emprender una acción - que al mismo tiempo sea malinterpretado por la persona o compañero que esté a su lado y provoque un desafío.
A partir de ese momento Raúl volverá a revivir de nuevo su infancia, pero con la consecuencia de que cada vez es más adulto y el problema cada vez se muestra más agravado, por tanto, cada vez le resultará más difícil entender el problema y cada vez sus huidas serán más grandes, como por ejemplo cambiar de trabajo porque sus compañeros o su jefe no deja de meterse con él, cambiar de la ciudad porque tiene un vecino que intenta matarle...
Ante esta nueva situación el inconsciente graba de nuevo el problema y su sistema de emergencia es cada vez más inseguro. Si os dais cuenta todo es un gran círculo, aquello que no hemos aprendido siempre vuelve a empezar, hasta que aprendamos la lección.
Cada segundo de nuestra vida, desde incluso antes de nacer, queda grabado en nuestro inconsciente y dependiendo de como vayamos aprendiendo así será nuestra experiencia de vida.
La vida no está marcada para nadie, nadie tiene un futuro exacto, simplemente lo que nos marca son unas pautas o unas lecciones que tenemos que aprender en un tiempo determinado - los años que dura una vida - y cuando ese tiempo termine, da igual si lo has aprendido, o no. Aquello que te quede por resolver en esta vida, lo tendrás que resolver en la siguiente
Siento que mi autoestima, y mis defectos, se han acentuado mucho este ultimo año.
Mis principales defectos desde siempre, han sido la inseguridad, lo que me ha llevado al nerviosismo, desde el punto en que comienzo a comerme las uñas, rascarme sin motivo la cabeza hasta hacerme a veces pequeñas heridas, y a tener un dolor abdominal constante por el estrés de la universidad y de la vida en general.
El año pasado conocí al amor de mi vida, y desde ese momento mi vida dio un giro drástico, comencé a sonreír por todo, a dejar de lado a mis amigos, un poco los estudios y a pasar la mayor parte de mi tiempo con él, en conclusión mi vida es él y nadie más, sin embargo hace un tiempo atrás comencé a sentirme distinta en mi relación, como menos querida, celosa por todo, y con muchísimo miedo de dejarlo, solo por pensar que me deje y yo muera totalmente, porque siento que dependo demasiado de él.
No sé, pero hay toda una serie de cosas implicadas, que jamás podría escribirlas aquí, pero en fin me gustaría aprender a ver las cosas de otro modo, porque yo se que mi amor es bueno, es amable, me ama y todo lo demás, pero al momento de confiar en el, me siento muy insegura y no logro controlar mis celos, mi angustia mi rabia cuando las cosas no son como deberían o me parece que deberían ser, y esto ha dañado un poco esta relación, que un día me hizo sentir muy feliz.
Quisiera volver a sentirme feliz, y bien conmigo misma, no creer que puedo perderlo, no creer que si el no hace algo, signifique que ya no le importo, quisiera aprender a quererme y a poder volver a estar sana de mente, además estoy llorando cada vez que peleamos, y ahora que me he controlado un poco ya estamos bien otra vez, pero en mi mente me sigo imaginando cosas, y sigo intentando que solo quiera estar conmigo, a mi lado constantemente y con nadie más.
Ayúdenme por favor.
Para querer a los demás debes quererte a ti misma, tienes que aprender esa lección en tu vida, pues si no la aprendes, correrás el riesgo de que todas las parejas te dejen y todas tus futuras relaciones se rompan por el mismo motivo.
Para explicártelo de otro modo, tu inconsciente ha grabado una situación o un miedo y a su vez, ha activado un sistema de emergencia que servirá como defensa para que ese miedo o pensamiento negativo desaparezca.
A lo mismo que Raúl, tu inconsciente ha seguido exactamente los mismos pasos.
Seguramente en tu infancia has sufrido una carencia de afectividad, de cariño y amor de personas cercanas a ti, incluyendo a tus padres o progenitores.
Al mismo tiempo que te ocurría esto, aprendiste un modo de superarlo, pero sin entender el porqué no te querían o porqué te sentías así.
El modo de superarlo seguramente fue a través de tus amistades, aquella amistad que te ofrecía cariño - el que te faltaba con otras personas -, te hacía sentirte bien y te cubría en cierto modo la carencia que tenías por otro sitio.
Es muy probable que inconscientemente te arrimaras tanto a esta persona que te lo proporcionaba y te hacía sentir tan bien, que probablemente estuvieras limitando la vida de esa amistad y como consecuencia cada vez podrías sentirte más alejada de la misma, sin saber la razón.
Tu inconsciente grabó un miedo, un pensamiento negativo - la carencia del amor que necesitas - en la infancia y a su vez aprendió un sistema de emergencia para salir de la situación - buscar el amor de otras personas y apegarse a ellas, y si es necesario luchar para que ese amor no desaparezca -.
Ahora eres adulta, y te enfrentas de nuevo al problema que no has asimilado en tu infancia.
Como puedes ver, la historia se vuelve a repetir hasta que aprendamos esta lección, a querernos por nosotros mismos.
Si sigues el ejemplo de Raúl - Nuestro protagonista unas líneas más arriba -, te darás cuenta en seguida de que todo lo que ocurre en tu entorno lo planeas tú con anterioridad. Raúl, aún no siendo atacado por nadie, siempre estaba preparado para activar su plan de emergencia - huir de su problema -.
Es muy probable que al estar inconscientemente preparado asocie un movimiento o conducta de la otra persona con otro movimiento que le recuerde de la infancia y crea que lo van a maltratar de nuevo.
Automáticamente Raúl activa su sistema de emergencia y a su vez emite un gesto o conducta haciendo que la otra persona emprenda contra él.
Lo mismo te ocurre a ti, el día que menos querida te sientes, ya sea por una conducta o movimiento que te recuerde a la carencia de tu infancia, inconscientemente activarás tu plan de emergencia y emitirás una conducta que tú chico malinterprete y como consecuencia se aleje de ti.
Debes aprender a superar, a entender tu miedo afectivo, el modo de hacerlo es quedándote sola, pasea en soledad, estudia sin que nadie te ayude, y aprende a disfrutar de la soledad, quiérete a ti misma antes que a los demás, porque si no entiendes tu amor, es prácticamente imposible entender el de los demás.
Repite esta frase siempre que puedas y constantemente.:
"AMAR A LOS DEMÁS ES FÁCIL CUANDO ME AMO Y ME ACEPTO A MI MISMA. MI VISIÓN INTERIOR ES CLARA Y DESPEJADA. ESTOY SEGURA Y A SALVO CUANDO EXPRESO MIS SENTIMIENTOS. ESTOY EN PAZ CONMIGO MISMA Y CON LA VIDA, SOY DIGNA DE AMOR Y TODO EL MUNDO ME AMA "
Un abrazo.
Voy a finalizar de nuevo, con una reflexión de Coelho:
Un poderoso monarca llamó a un santo padre, del que todos decían que tenía poderes curativos, para que lo ayudase con sus dolores de columna.-Dios nos ayudará -dijo el hombre santo-.
Pero antes vamos a entender la razón de estos dolores.
La confesión hace que el hombre se enfrente con sus problemas, y lo libera de muchas cosas.
Y el sacerdote empezó a preguntarlo todo sobre la vida del rey, desde cómo trataba a su prójimo hasta las angustias y aflicciones de su reinado.
El rey, molesto por tener que pensar en problemas, se volvió hacia el hombre santo. -No quiero hablar de esos asuntos. Por favor, traedme a alguien que cure sin hacer preguntas.
El padre salió y volvió media hora después con otro hombre.
-Este es el hombre que necesitáis -dijo él-. Mi amigo es veterinario. No acostumbra a hablar con sus pacientes.
Paulo Coelho "MAKTUB"
En el próximo capítulo continuaremos sobre el inconsciente y su manifestación a través de los sueños.
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